Las metanfetaminas son una droga que data del siglo XX y se desprenden de la droga original llamada anfetamina. Como tantas otras drogas, fue creada con propósitos médicos hasta que se descubrió su alto potencial adictivo y los daños que podía llegar a causar en el organismo mediante su consumo indebido.
Pero ¿Qué es realmente esta droga?
Es una de las drogas más potentes dado que actúa como un estimulante poderoso y adictivo que altera el sistema nervioso central.
Esta droga se comercializa en forma de pequeños cristales cuyo aspecto visual es similar a fragmentos de vidrio o piedras brillantes en la gama de los blancos.
Anfetaminas, metanfetaminas y las diferencias con otros estimulantes
Su estructura molecular es similar a la de la anfetamina (que se usa para tratar trastornos de déficit de atención e hiperactividad) y la dopamina (sustancia reguladora de conductas placenteras).
Diferencias con las anfetaminas
La principal diferencia con la anfetamina, es que las cantidades de metanfetamina que llegan al cerebro son mayores, lo que la convierte en un estimulante más potente y peligroso. A su vez, los efectos suelen durar más y generar más daño en el sistema nervioso.
Diferencias con la cocaína
La cocaína se elimina más rápido del organismo y se metaboliza casi por completo. Por el contrario, la metanfetamina tiene un tiempo de acción mayor y la droga permanece por más tiempo en el cuerpo (por lo tanto en el cerebro) sin sufrir modificaciones. Otra diferencia es que la metanfetamina hace que el cuerpo produzca niveles mucho más altos de dopamina.
¿Qué grupos son más vulnerables a esta droga?
En un principio, el usuario promedio de esta droga eran los hombres adultos de bajos ingresos, por lo que fue conocida durante algún tiempo como la droga de los pobres. Sin embargo, en la actualidad, es consumida por personas de todas las edades y niveles económicos. Siendo gran parte de ellos adolescentes o adultos jóvenes. Además, es cada vez más frecuente que las metanfetaminas se utilicen como base y se mezclen con otro tipo de drogas y estimulantes.
Modalidades de consumo de las metanfetaminas
Otro de los factores que hacen de esta droga algo peligroso es que posee una gran versatilidad al momento de ser consumida.
Se puede:
- Fumar.
- Ingerir en formato de píldoras.
- Aspirar.
- Disolver en agua o alcohol e inyectar.
¿Por qué es tan adictiva?
Además de los puntos antes mencionados, los efectos de esta droga empiezan y terminan rápido, lo que lleva a que muchas personas tomen varias dosis en pocas horas durante varios días.
Efectos en el corto plazo
Aumento de la vigilia y la actividad física, disminución del apetito, ritmo cardíaco irregular, presión arterial y temperatura corporal elevadas.
Efectos a largo plazo
Las metanfetaminas alteran el juicio y la toma de decisiones, llevando a las personas a tomar conductas riesgosas como tener sexo sin protección y el uso compartido de jeringas entre dos o más personas, dejando a sus consumidores expuestos a enfermedades infecciosas como el VIH y la hepatitis.
Por otro lado, estudios recientes demuestran que el VIH genera más daños y problemas cognitivos en personas que consumen metanfetaminas (problemas de pensamiento, comprensión, aprendizaje y memoria).
Otros síntomas a largo plazo son la pérdida excesiva de peso, problemas dentales graves, comezón intensa que genera lesiones en la piel, ansiedad, comportamiento violento, paranoia y alucinaciones.
Además, esta droga afecta las áreas del cerebro que están relacionadas con la emoción y la memoria, generando daños que muchas veces son irreversibles.
¿Qué hacer en caso de sobredosis?
Dada su modalidad de consumo repetitivo, gran porcentaje de las sobredosis por drogas están relacionadas con las metanfetaminas.
En este caso, los efectos de una sobredosis incluyen embolia cerebral, infartos cardíacos y problemas en otros órganos. Cuando esto sucede, resulta indispensable que la persona sea asistida lo antes posible para que no se corte la circulación sanguínea al cerebro y al corazón.
Una vez que el paciente pueda estabilizarse, comienza el tratamiento de rehabilitación y los síntomas de abstinencia, que también deberán ser tratados por profesionales para que la recuperación sea exitosa.
Los principales síntomas de la abstinencia son ansiedad, fatiga, depresión, psicosis y deseos de consumir.
¿Qué tratamientos existen?
Hasta el momento, no existen tratamientos farmacológicos específicos para estos síntomas, lo cual hace aún más importante una correcta contención del adicto con terapias conductuales, de modo tal que el paciente pueda reconocer, evitar y hacer frente a posibles situaciones de consumo y recaídas.
Nuestra misión en FORUM, es brindar acceso a tratamientos específicos para cada persona, una rehabilitación que contará con atención psicológica, terapias grupales, atención médica, ejercicio físico, contención emocional y trabajo en conjunto con familiares y amigos.
Las adicciones difícilmente pueden atravesarse con éxito sin ayuda profesional y contención familiar, si crees que tú o alguien de tu familia tiene un problema de consumo, no dudes en contactarnos, podemos ayudarte.